La liquidación concursal de empresas es un proceso contable y jurídico en el cual se da fin a la sociedad, y sus activos se redistribuyen entre los acreedores según el orden de ley
¿Conoces cómo se realiza la liquidación concursal de una empresa? o ¿quién está legitimado para solicitar la liquidación?
Si tu respuesta es negativa, en el siguiente artículo te explicaremos con detenimiento en qué consiste, cuáles son sus fases, y todo lo que necesitas conocer al respecto.
La liquidación concursal de empresas busca transformar los bienes de la sociedad en dinero. Todo con el objetivo de cumplir con el pago de los acreedores de acuerdo a la clasificación de privilegiados, ordinarios, o subordinados
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¿Qué es la liquidación concursal de empresas?
La liquidación concursal de empresas es una de las fases ejecutadas durante el concurso de acreedores; y tiene como propósito transformar los derechos y bienes de la masa activa de la sociedad en dinero. De manera que, a través de este procedimiento se les garantizará a los acreedores el pago de sus créditos según la preferencia establecida en la ley.
Sin embargo, es importante señalar que existe un orden de pago de las deudas. Este orden será establecido por el administrador concursal. El administrador concursal categoriza las deudas de acuerdo a los créditos privilegiados, ordinarios y subordinados. En función de ello se pagarán unas deudas en preferencia de otras.
Por otra parte, junto con el principal objetivo de satisfacer las deudas de los acreedores, se presentan otros intereses que merecen protección como los puestos laborales, los cuales deben ser considerados en la enajenación.
Liquidación concursal voluntaria
En relación a la liquidación concursal voluntaria se debe señalar que el deudor está legitimado para solicitar la liquidación en cualquier instante del proceso. De igual forma, el deudor también podrá solicitar la liquidación concursal cuando no tenga las condiciones para cumplir con el acuerdo extrajudicial de los pagos ya convenidos.
Una vez que el juez conozca la solicitud, contará con un período de diez días a partir del conocimiento para dictar el auto abriendo la fase de liquidación.
De igual manera, cuando culmine la fase común, el deudor puede decidir entre abrir la fase de liquidación o de convenio. Por su parte, debido al carácter voluntario que caracteriza a esta fase, será exigida por escrito como forma de garantía.
Liquidación concursal persona natural
Cuando la liquidación concursal es realizada por una persona natural, la apertura de esta fase genera la suspensión de las facultades de disposición y administración de su patrimonio, el cual le corresponderá ahora al administrador concursal.
Igualmente, se produce un efecto en relación a la extinción del derecho de alimentos con cargo a la masa activa. Esto será aplicable para el deudor y las personas sobre las cuales éste posee un deber legal. Sin embargo, no se extingue la obligación de dar alimentos impuestos por una decisión judicial en procesos de matrimonio, capacidad, filiación o menores.
Liquidación concursal subasta
En principio la liquidación concursal de empresas debe llevarse a cabo según lo dispuesto en el plan de liquidación. Asimismo, tienen que seguirse las medidas establecidas en la Ley Concursal.
En este sentido, la fase de liquidación del patrimonio del deudor se realiza por tres vías: venta directa, dación en pago, y la subasta. En relación a esta última, se le da al acreedor privilegiado especial la alternativa de conseguir una oferta mayor con un mejor postor, culminando la venta por un precio menor.
Con el dinero obtenido se pagarán los créditos de todos los acreedores siguiendo el orden legal establecido. No obstante, debido a la pandemia del Covid-19 se realizaron modificaciones al procedimiento para evitar el incremento de litigios por concurso de acreedores en los Juzgados Mercantiles.
De manera que, se impuso forzosamente por vía extrajudicial la subasta de los bienes concursales que forman parte de la masa activa. Este cambio afecta a aquellos que iniciaron el concurso de acreedores un año después de que fuera declarado el estado de alarma.
Procedimiento concursal de liquidación
El procedimiento de liquidación concursal de empresas comienza con la elaboración del plan de liquidación. Este documento es realizado por el administrador concursal y presentado ante el juez para su aprobación.
Ahora bien, para elaborar el plan de liquidación el administrador debe considerar el interés del concurso y la satisfacción de los créditos de los acreedores. Asimismo, debe buscar la enajenación unitaria del establecimiento, y las unidades productivas que conforman la masa activa.
Una vez que se presente el plan ante la autoridad judicial, los acreedores y representantes de los trabajadores formularán sus observaciones y presentarán propuestas de modificación en un lapso de 15 días. Finalizado el plazo, el juez dará su aprobación al plan mediante un auto junto con las modificaciones que considere oportunas.
Por otra parte, aprobado el plan de liquidación el administrador concursal podrá comenzar a ejecutar acciones para vender los activos de la sociedad concursada siguiendo el plan. Sin embargo, para que el juez controle el proceso, el administrador deberá presentar un informe detallado de las operaciones realizadas cada 3 meses.
El plan de liquidación puede ser objeto de modificaciones si el administrador concursal lo solicita y el juez lo aprueba. Sin embargo, en la solicitud deben señalarse las reglas modificadas, eliminadas o incluidas en el plan. Por su parte, la autoridad judicial en su auto aprobará las modificaciones que considere convenientes.
Liquidación de empresa en concurso de acreedores
La liquidación de empresa es una fase a la que se llega en el concurso de acreedores cuando no se logró un convenio, o no se pudo cumplir. De manera que, mediante esta fase se busca vender el patrimonio para cumplir con las deudas adquiridas con los acreedores, las cuales se pagarán según el orden establecido en la ley.
Ley de liquidación concursal
Es importante señalar que, la fase de liquidación concursal se encuentra regulada en el Real Decreto Legislativo 1/2020 que aprobó el Texto Refundido de la Ley Concursal en su disposiciones 406 al 440. En cada una de estas normas se expone la apertura de la fase, los efectos que ocasiona, y las operaciones de liquidación.
En conclusión, la liquidación concursal de empresas supone la venta de todos los derechos y bienes que forman parte de la masa activa. Esto se realiza con el fin de obtener dinero y pagar a los acreedores los créditos debidos según el orden establecido por la ley.
Sin embargo, para realizar correctamente la liquidación se requiere de la ayuda de especialistas que cuente con experiencia en el área. Es por ello que en Consultoría y Peritaciones C&P encontrará al mejor equipo de profesionales, dispuestos a brindarle sus conocimientos y acompañarlo durante el proceso. ¡Comuníquese con nosotros!